Hoy comienza el invierno, una estación que nos encanta por que nos regala los paisajes invernales más espectaculares con la nieve o el hielo. Aunque no nos referimos a esta última temporada del año con la quinta estación, sino a la Navidad.
Y es que queremos dar la bienvenida a la época del año más mágica y especial sobre todo para los más pequeños de la casa, aunque también nosotros los mayores nos ilusionamos en estas fechas del año igual que cuando éramos niños. Hay lugares en el mundo que se viven estas fechas de manera tan intensa que esta época es considerada la quinta y última estación del año y es que realmente se transforman con la llegada de la Navidad. En España, y en concreto en el Pirineo, cada vez se mima más la Navidad cuidando la decoración de nuestras calles, preparando nuestras bebidas y comidas tradicionales o programando la agenda de eventos con actividades especiales para todos los públicos.
Visitarnos en estas fechas te hará sumergirte de lleno en nuestras más remotas tradiciones, que conviven con costumbres modernas y precisamente esta mezcla que nos identifica, nos convierte en uno de los lugares más especiales para una escapada navideña.
Ya nuestros antepasados los celtas celebraban el solsticio de invierno (alrededor del día 24 de diciembre) en honor al nacimiento del niño-Sol, hijo de la Gran Madre, la Tierra. Adornaban sus casas con muérdago o guirnaldas de acebo con el afán de protegerlas y hacían sonar campanillas para ahuyentar a los malos espíritus y por eso hoy en día seguimos colgando campanas de nuestros árboles navideños. Los colores empleados en la decoración, eran el rojo como símbolo del nacimiento por la sangre del parto y el verde que hacía referencia a la tierra. También manzanas o piñas, representando a la fertilidad o a la vida después de la muerte.
Otro de los acontecimientos más entrañables de estas fechas era la “Tronca de Navidad”, un rito ideal para reunirse en familia. Podéis ver en que consiste en el siguiente enlace: Tronca de Navidad
El rico Poncho Navideño mezclado con los turrones o dulces típicos caseros son parte de nuestra identidad gastronómica y llenan nuestros hogares de aroma navideño. Los belenes se pueden ver por todas partes e incluso en muchos casos son los propios habitantes de los pueblos quienes se enfundan en los trajes antiguos para remontarse años atrás y escenificarlo. Villancicos por las calles, iluminación navideña, las zambombas, árboles de navidad, teatros, conciertos navideños, rutas gastronómicas, cabalgatas de Reyes… tenemos tantas cosas preparadas para estos días que sin duda vuestra estancia será especial.
Prepárate para disfrutar en familia, llenar estos días de momentos y recuerdos. El mejor adorno es una sonrisa y el regalo más especial para nosotros es vuestra compañía.
Desde el Área de Turismo de la Comarca del Alto Gállego, os deseamos ¡¡¡FELIZ NAVIDAD Y UN MARAVILLOSO AÑO NUEVO!!!