No. No puede terminar el verano sin haber bailado bajo la lluvia en el Alto Gállego, sin descubrir un nuevo rincón de la Guarguera o subir un nuevo ibón desde del Balneario de Panticosa.

No puede terminar sin tomarte una cerveza en la plaza del pueblo, sin comer unas “sopetas” o sin de pasar por Yebra de Basa. Conocer nuevos pequeños pueblos o subir a Santa Orosia. No puede terminar el verano sin visitar Erata y sin hacerte una foto el mirador de Yésero. Tampoco olvides pasear por Sallent de Gállego.

No termina si no pasas por Caldearenas y descubres las Iglesias del Serrablo de Latre o de Javierre. Tampoco termina si no has pasado por Biescas y te has acercado a San Juan de Busa.

No olvides de correr bajo las estrellas, descubrir la noche en Hoz de Jaca y por supuesto recuerda  de suspirar,  #respirapirineo.

El verano no termina, continua con las sendas de El Betato o pasando por el Puente de las Pilas en BTT, disfruta de cada curva en bicicleta, de la carretera en moto o de cada vuelta de baile.

Disfruta cada segundo de la puesta del sol, de los tuyos.

Disfruta del Alto Gállego.